domingo, 23 de agosto de 2009

Si eres de Chile, se necesita tu ayuda!!!



Necesitamos urgente buscar refugio para los perritos que son abandonados en Renca, especialmente en el sector de la bodega de Coca Cola… (Miraflores) y Lo Boza...

¡¡NO QUEREMOS MAS ABANDONO NI MALTRATO ANIMAL!!

NECESITAMOS HOGARES TEMPORALES, HOGARES DEFINITIVOS, DIA A DIA SIGUE HABIENDO MAS CRUZAS, NACEN NUEVOS PERRITOS, NECESITAMOS COMIDA, ROPA DE ABRIGO, MATERIALES PARA HACER NUEVAS CASAS, RECURSOS PARA FINANCIAR LAS ESTERILIZACIONES, VACUNAS, DESPARASITAR, SUFREN DE SARNA, TVT, ETC. SON PERRITOS EN PESIMAS CONDICIONES, SOLO VEAN LAS FOTOS, Y DIA A DIA, VAN ABANDONANDO MAS PERRITOS EN EL LUGAR.
¡¡NECESITAMOS TODA LA AYUDA QUE NOS PUEDAS BRINDAR!! ¡¡MUCHAS GRACIAS!!

MIRZA VALLEJOS
ladynzane@gmail.com

NOS PUEDES AYUDAR CON: COMIDA, ROPA, MATERIALES PARA CONSTRUIR CASA, PLASTICO PARA PROTEGER DE LA LLUVIA, ROPITA PARA PERRITO, DIFUNDIENDO EL GRUPO, PROMOCIONANDO A LOS PERRITOS EN ADOPCION, DANDO HOGAR TEMPORAL O DEFINITIVO, ACOMPAÑANDONOS A LAS JORNADAS, ETC.
SOLO PREGUNTANOS COMO PUEDES AYUDAR.
GRACIAS AL TRABAJO EN EQUIPO, HEMOS REGALADO VARIOS CACHORROS QUE HAN PODIDO SUPERAR EL ABANDONO, LE ENCONTRAMOS CASA A JANITO, PERRITO ABANDONADO Y MALTRATADO, HEMOS ESTERILIZADO PERRITAS Y CONTROLADO EL CRECIMIENTO DE LA MANADA, SIN EMBARGO, QUEDAN OTROS AUN ESPERANDO POR UN HOGAR Y HEMOS PRESENCIADO ATROPELLOS, AHORCAMIENTOS, ETC.
INCLUSO PODRIAS APADRINAR UN PERRITO Y CUIDAR DE EL SIN TENER QUE TENERLO EN TU CASA
DE VERDAD, NECESITAMOS DE TU AYUDA!!!

sábado, 22 de agosto de 2009

El Animalismo, terrorismo o excentricidad



Está visto que colaborar activamente en la lucha contra el maltrato a los animales es ganarse la etiqueta de “rarito”. Y no me refiero a que te la coloquen los que cazan, los que alancean un toro en Tordesillas, los que lo abrasan en Medinaceli, aquellos que despellejan visones o los que hacinan gallinas ponedoras en una granja; esos tienen otros epítetos para los animalistas: sectarios, terroristas, drogadictos, hasta el de “comunista” he llegado a escuchar. Les falta el de “masón” para parecerse a un cazador, pescador y firmante de penas de muerte que yo me sé. Digamos que su lenguaje, como vehículo de sus pensamientos, es el propio de individuos bastante ariscos e insociables y que cuando hablan es como cuando disparan, ahorcan, ensartan la lanza o muelen a palos a un animal: un derroche de violencia parejo a una falta absoluta de ética y de civismo.

La cuestión es que hay personas que si bien no se preocupan en absoluto por el sufrimiento al que los animales se encuentran sometidos en este País, tampoco contribuyen al mismo al menos de forma activa, lo que no quiere decir que no consuman productos cuya obtención, haya supuesto el padecimiento y la muerte de estas criaturas o que no participen en actividades generadoras de maltrato animal, como circos o zoológicos. Pues bien, estos digamos “indiferentes”, son los que en su mayoría, catalogan de excéntricos a los animalistas y los contemplan como una especie de iluminados que habitan en otra dimensión y cuyas reivindicaciones les suenan delirios de lunáticos.

Yo me pregunto si estas personas se han parado a analizar qué es realmente el movimiento animalista y cuáles son las premisas en las que se basa, o simplemente se están dejando llevar por costumbres adquiridas durante milenios y son producto de una educación que en ocasiones, aliena más que dota del talento para reflexionar con espíritu crítico acerca de nuestra existencia y la de todo aquello que nos rodea.

Una chica puede pasearse con el tanga por la casa del “Gran Hermano” que antes o después, se creará su club de fans y será invitada a diversos programas de televisión. Pero si a otra se le ocurre tumbarse frente a una plaza de toros en ropa interior y con unas banderillas ensangrentadas a la espalda, será una de esas “chaladas” que están en contra de las corridas. ¿Y eso por qué ocurre?, pues porque en esta Sociedad domesticada y con una capacidad para el análisis bastante abotargada, todo vale mientras no vaya contra el Sistema y sobre todo, si no afecta a nuestros intereses, y cuando me refiero a éstos es porque no se tiene en cuenta más que el perjuicio propio, por ridículo que sea, sin pensar en las consecuencias, a veces mortales, que para otros pueda implicar nuestro “bienestar”.

Decir que no a la caza deportiva, a los festejos taurinos, a la industria de la peletería, a las granjas intensivas o a los circos con animales, es darse de bruces con leyes que amparan esas actividades por lo tanto, pedir su desaparición, es convertirse en un elemento incómodo para una estructura social consolidada que teme los cambios, ya que éstos pueden alterar un orden establecido que es la base de la autoridad a la que estamos sometidos. Por eso a Usted le toleran actuar “libremente” siempre y cuando no se atreva a poner en duda la legalidad vigente. “Os permitimos que abráis protectoras con vuestros medios, pero no se os ocurra exigir que los ayuntamientos dejemos de sacrificar perros”. Es un ejemplo de esta política colmada de desafueros sociales y morales.

Y luego tenemos a los ciudadanos, tan modernos, tan progresistas y civilizados. Siempre dispuestos a colaborar con unos euros en una ONG, a reciclar la basura o a llorar viendo Bambi con sus hijos. Pero cuidado, que a nadie se le pase por la cabeza privarles de los encierros, impedirles contemplar a José Tomás en una de sus artísticas faenas sangrientas, quitarles de la estantería del Hipermercado los huevos cuyo código empieza por 2 ó 3, despojarles de la licencia de caza o decirles que no se coman en un restaurante una langosta que han cortado viva. La solidaridad está muy bien mientras ellos no hayan de variar ni un ápice sus gustos o costumbres. Por eso, cuando ven a unos cientos de personas con pancartas que hablan de la “Liberación Animal”, lo primero que se les ocurre pensar es: “ya están haciendo de las suyas esa pandilla de perturbados y radicales que nos quieren quitar lo que siempre ha sido así”.

“Lo que siempre ha sido así...”. He ahí una definición del egoísmo cuando esa expresión equivale a decir: “No aceptaré ningún cambio que pueda afectarme lo más mínimo”. Y esa es la verdadera fuerza de los que son crueles de tantas formas con los animales, que no está tanto en su conducta criminal – crimen al menos moral, ya que todavía no lo es legalmente - sino en la indiferencia cómplice de los que sin torturar, contribuyen a la tortura, y sin matar son colaboradores en esas muertes. Por muchos que sean, que tampoco son tantos, los verdaderos causantes del padecimiento extremo y del “asesinato” de animales, nada podrían hacer si el resto de los ciudadanos se declarasen en contra de estas prácticas espantosas con seres vivos. El silencio es una complicidad muy efectiva.

Pero entre la violencia de unos y el egoísmo de otros, entre los intereses de los primeros y la comodidad de los segundos, el resultado es que siguen muriendo cada día millones de animales en una sangría que no tiene comparación con ninguna otra. No existe en ámbito alguno sufrimiento que exceda en número de víctimas al que padecen los animales. Y por favor, que no venga ninguno de los del primer párrafo o del segundo, diciéndome ahora que de mi frase se deduce que no me importa el dolor en el hombre. Ese argumento tan corrompido como aquellos que lo emplean, es una más de las falacias indignas con las que tratan de desacreditar al movimiento animalista, a cuyos miembros, por cierto, les suele preocupar y mucho el padecimiento humano, tal vez a diferencia de la mayoría de los que utilizan contra ellos precisamente esa acusación, que por importarles, se importan tan sólo ellos mismos.

Lograr que usos y costumbres aceptadas y empleadas durante siglos desaparezcan es una labor titánica y muy lenta, porque el ser humano, a pesar de su condición de gregario, tiende a aislarse en lo que se refiere a cuestiones de empatía con el dolor ajeno. Somos una comunidad inmensa con problemas compartidos pero nuestra concepción de los mismos es individualista, he ahí el arma de los causantes del sometimiento de tantos seres vivos, y si esa es nuestra actitud cuando se trata de animales humanos, qué no será cuando los afectados carecen de racionalidad: pues que pasamos incluso a desempeñar, y muy gustosos, el papel de opresores y de verdugos. La revancha por nuestra propia debilidad, la solemos descargar contra aquellos que padecen mayor indefensión todavía que nosotros.

Hoy somos una especie de terroristas para algunos y una suerte de orates para otros. Algún día, nuestras exigencias de ahora, serán ley y pasaremos de ocupar el papel de villanos, al de abanderados de una causa justa. Pero mientras tanto, millones de ciudadanos coadyuvan a esta lacra vergonzosa del maltrato a los animales, unos por acción, otros por omisión y la Administración, como siempre, viendo qué chaqueta se pone para gustar más a la afición y recibir el aplauso electoral.

Me gustaría que todas esas personas que tienen un perro, un gato, un canario o un caballo, se imaginasen a su “compañero” siendo ahorcado, ahogado, reventado a perdigonazos o con una tranca permanentemente aferrada a su pata, seguro que en la mayoría de los casos se les revolverían las entrañas y lucharían contra semejante crueldad. Pues ahora, que me expliquen la diferencia entre su “amigo irracional” y todos los perros de cazadores, jabalíes, zorros, visones, gallinas, toros, caballos, ocas o palomas que mueren entre terribles sufrimientos mientras ellos, no hacen nada por evitarlo. Y es que poco tiene que ver el dolor si es mi hijo el que lo padece, con el de un niño palestino, ¿verdad?, pues algo parecido ocurre con los animales, que mientras a mi perro no lo toquen, da igual que en la perrera que hay a quinientos metros de mi casa, los sacrifiquen a la semana de ser capturados o que le atraviesen con acero los pulmones a seis toros en la plaza que hay a un kilómetro. Y los que protestan contra eso son peligrosos extremistas o simples majaretas, dependiendo de mi grado de afición a la tauromaquia. Entre crueldades, cobardías y egoísmos, chapoteamos cada día en un mar de sangre ajena.

Julio Ortega Fraile.

miércoles, 19 de agosto de 2009

Ori, el sentido de su vida...



Verás, Ori, te explico por qué sigues ahí, en ese agujero, año tras año, con el único consuelo de saber que ya te queda menos.

Te cuento, Ori, el por qué de tus patas hinchadas a mordiscos, de los ataques de otros desheredados, a los que la miseria que os rodea convirtió en tus enemigos de canil...verás la razón de tus dientes desgastados antes de tiempo, y entenderás, entenderemos, el por qué de tu mirada de tristeza infinita, de tu cuerpo golpeado, de tu alma sola…

Tu caso es difícil, Ori…por ser optimistas…

Ori, no tienes pedigree, ese papelito donde dice lo que vales, así que, Ori, no tienes valor alguno...

Ori, no tienes raza!! Dicen, los que saben muucho de perros, que cada raza tiene su por qué, su sentido, así que, Ori, no tiene ningún sentido que tú existas!!…(Si por lo menos fueras sólo de un solo color, Ori...es que no has ayudado nada, eh?!)



Y es por eso que estás ahí, metido en ese agujero, en la NADA….olvida esas pamplinas de cachorro idealista que llegaste a tener, que si sólo nacíste para amar y ser amado, que si estás hecho para jugar, para acompañar...olvida eso de que regalar tu dulzura es tu misión!!…la realidad es la que da los mordiscos más duros, eh, Ori?

Ori, pero ahora viene lo peor, lo que te va a matar…Y ES QUE SOIS CIENTOS DE MILES!!! la probabilidad de que nuestras fuerzas, recursos y esos escasos milagros que pasan de vez en cuando, lleguen hasta tí, en concreto, Ori, para ayudarte, es tan lejana, que mejor te haces a la idea de que esa posible salvación no existe...

O es que ya lo has hecho? te has resignado ya?...espera, Ori, espera!!...UN ÚLTIMO INTENTO!!!

Si eres capaz de ver que el sentido de la vida de Ori eres tú...escríbenos a sosgolden@gmail.com



Situación actual: Ori, parece un cruce de labrador ...:-))
Pesará unos 22 kilos, tiene un carácter dulce y bueno con todos, humanos y animales. Está aquí desde el 2005. Tendrá unos 5-6 añitos. Lleva años sufriendo los ataques de sus compañeros de canil...el otro día apareció con las patas hinchadas, de los mordiscos de sus compañeros de jaula. Le han trasladado a una mini jaula, para separarle por un tiempo, pero es demasiado pequeña y tarde o temprano volverá a su canil...y cualquier día....

martes, 18 de agosto de 2009

EL MICROCHIP, ¿Cómo, cuándo y por qué debo ponérselo?


MICROCHIP, ¿Cómo, cuándo y por qué debo ponérselo?

Has decidido aumentar la familia, el nuevo cachorro ya está en casa, tienen su sitio, sabes como alimentarlo y te has informado de los cuidados mínimos que requiere, ahora ha llegado el momento de decidir si le pones o no microchip. Si es un perro lo tienes claro, en la mayoría de las comunidades autónomas es obligatorio ponérselo pero y si es gato, hurón o chinchilla...

El microchip es un sistema electrónico de identificación que se implanta bajo la piel del área izquierda del cuello de tu cachorro una vez en la vida. Para implantárselo deberás recurrir al veterinario. Él, con un leve pinchazo tan poco traumático como una simple vacuna, introducirá bajo la piel de tu cachorro un chip del tamaño de un grano de arroz que le acompañará siempre, informando a todo el que quiera saberlo del nombre, dirección y teléfono de su propietario.

Este tipo de dispositivos funciona como un código de barras, con el aparato adecuado -un lector de microchip que suelen tener todas las clínicas veterinarias, perreras, protectoras e incluso autoridades- podrá ser leído y el animal quedará identificado sin dudas. Su lectura arroja un número que en el colegio oficial de veterinarios tienen asociado a los datos del propietario del animal.

Con el microchip conseguirás que tu cachorro esté en todo momento identificado, algo muy útil si se pierde, tanto si es perro como si es gato, estos últimos son mucho más zascandiles de lo que parecen en principio. Fíjate en las calles, las ciudades están siempre llenas de carteles con fotografías de gatos que se han perdido y no querrás que el tuyo entre a formar parte de esta lista negra de desaparecidos.

Además de ser la mejor manera de evitar la perdida, el microchip permite que tu animal quede censado al igual que lo quedaste tú al hacerte el D.N.I., algo muy practico para que las autoridades lleven a cabo campañas sanitarias más eficaces pero también una de las mejores formas de evitar posibles robos.

Sacado de: www.mascotas.info

lunes, 17 de agosto de 2009

MeDaLLa Al VaLoR



MEDALLA AL VALOR
La Doberman de la fotografia está embarazada. El bombero acaba de salvarla de un incendio en su casa, la salvó
sacándola de la casa al jardín, y luego continuó en la lucha contra el fuego. Cuando finalmente se apagó el fuego, se sentó para tomar aliento y descansar. Un fotógrafo del periódico Noticias de Carolina del Norte, notó que la perra en la distancia miraba al bombero.. Vio a la Doberman caminar directa hacia el bombero y se preguntó qué iba a hacer. Así que levantó su cámara, el animal llegó hasta el hombre cansado que acababa de salvar su vida y la vida de sus bebés.
El fotógrafo captó el momento justo del momento en que el perro besó al bombero.

Ellos siempre estaran observandonos agradecidos por el esfuerzo que vertimos en ellos!